Este domingo pasado volvía el circuito con la penúltima prueba y última media maratón, una media maratón que comienza la pista de atletismo de la localidad y su mayor parte del recorrido discurre entre caminos rurales, con la subida al cerro de San Isidro, finalizado de nuevo en dicha pista, llegando a meta 432 atletas, en una mañana nublada, con algo de llovizna, pero buena temperatura, para cubrir los más de 21 kms.
En esta ocasión 3 fueron nuestros representantes en la localidad churriega, donde cada cual buscaba su objetivo, objetivos que lograron disfrutando un fin de semana más de este deporte duro y sufrido a la vez que agradecido.Manuel Jiménez, (1h26’51), necesitaba un respiro, y aunque su gen competitivo siempre sale a la luz, en esta ocasión no lo explotó al máximo, consciente de que el objetivo de vencer el circuito lo tiene logrando finalizando la 10K de Daimiel y por supuesto Miguelturra, objetivo que logró corriendo inteligentemente y por sensaciones, relajado y de manera disfrutona, tras dos fines de semana anteriores de éxitos.Antero Sánchez-Migallón, (1h41’27”), sustituía el objetivo inicial y principal propuesto por esta media maratón, la DANA, fue la culpable, pero los entrenamientos previos no podían caer en saco roto y aprovechó esta carrera para prodigarse una vez más en el circuito con nuestros colores en una buena carrera.Antonio Jiménez, (1h42’35”), tras un fin de semana largo y pocas horas de descanso, volvía por segundo año donde debutó en esta distancia, con el objetivo de finalizarla de nuevo y en todo momento con el globo de 1h45’, gestionando el esfuerzo y llegando a meta con un tiempo mejor de lo previsto, mejorando incluso el crono del año pasado.Daimiel será la última parada de este año en el circuito, donde esperemos recuperar efectivos, pues la lesiones y otras circunstancias han hecho que nos veamos mermados, no obstante, nuestro club, nuevamente, puede hacer un balance positivo a pesar de las “piedras en el camino”.